Almuñécar y La Herradura, donde el Mediterráneo se vuelve tropical

Descubre un lugar privilegiado donde el mar y la montaña se dan la mano para crear un paisaje único en el Mediterráneo. Nuestra ubicación, en la Costa Tropical (Granada, Andalucía) protegida por sierras y abierta al mar, no solo define nuestro destino, sino también la calidad de los frutos tropicales que nacen en estas tierras. Aquí, la agricultura y el turismo conviven en armonía, dibujando un territorio que habla de tradición, naturaleza y autenticidad.
Mientras paseas por nuestras vegas cultivadas o visitas alguna de las fincas agroturísticas, descubres cómo cada bancal y cada árbol narran la historia de una tierra fértil moldeada por el clima. Más de 300 días de sol al año, temperaturas suaves y la influencia constante del Mediterráneo crean un clima tropical único en Europa, esencial para que prosperen los cultivos que nos distinguen.
Por eso, cuando pruebes un mango recién cortado, una chirimoya dulce o un aguacate cremoso, saboreas la misma luz que te acompaña mientras paseas por nuestras playas. Aquí, el sol no solo ilumina: nutre, da vida y convierte cada visita en una experiencia inolvidable, donde agricultura, paisaje y mar se unen para mostrarte la esencia más auténtica de la Costa Tropical.
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Visita una de las fincas agroturísticas
Visitar una de las fincas agroturísticas de Almuñécar y La Herradura es una experiencia que te conecta directamente con la esencia tropical de nuestro destino. Aquí no solo contemplas el paisaje: lo vives. Caminas entre árboles cargados de mangos, aguacates o chirimoyas y descubres, de la mano de quienes cultivan la tierra, cómo el sol y el clima se unen para dar vida a frutos únicos en Europa.
A medida que avanzas por la finca, sientes el aroma de la vegetación, escuchas el murmullo del Mediterráneo a lo lejos y comprendes por qué esta tierra es tan fértil. Cada explicación, cada historia y cada rincón te muestran la pasión y el cuidado con los que se trabaja un producto que forma parte de nuestra identidad.
La visita se convierte en un viaje sensorial: pruebas la fruta recién recolectada, aprecias matices que nunca antes habías saboreado y conectas con un modo de vida que combina agricultura, sostenibilidad y cultura local.
Es una experiencia enriquecedora, auténtica y diferente; una oportunidad para conocer la Costa Tropical desde dentro, desde sus raíces, desde aquello que nos hace únicos.
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FINCAS AGROTURÍSTICAS

